jueves, 14 de julio de 2016

Trabajos de verano

     Estoy crocheteando como loca (más bien como pollo sin cabeza). Tengo las manos inquietas pero me cuesta terminar nada.
     Lo único que sí he terminado últimamente ha sido una pequeña mantita de apego de la que publicaré foto pero no tutorial (pero que se puede repetir fácil ya que usé dos patrones muy conocidos y que sí tengo localizados). Quedó una auténtica monada.
     Por otro lado tengo empezada una manta en espirales que no avanza (y que no he tocado este verano), un top que empecé con muchas ganas y sin patrón pero por el que perdí interés muy rápido (que igual deshago y aprovecho el algodón para otra cosa), una manta en lana bebé rosa con forma de estrella que va avanzando pero muy poco a poco (y es el único proyecto que tira) y un ensayo de chaleco que sé que no va a ir a ningún sitio pero que tejo con una lana de la que tengo una cantidad ingente y no sé en qué emplear (y que igual no acabo o igual luego deshago, pero es una prueba).
     Vamos, que las manos las tengo ocupadas, pero sin rematar nada. Obviamente la manta-estrella la voy a acabar, pero como bien dice la mamá,  Leire está sólo hecha al 70%, así que tengo hasta octubre para acabarla y avanza a buen ritmo. De hecho creo que crece al mismo ritmo que la niña, de momento.
     Lo dicho, lo siguiente, la mantita de apego.

sábado, 12 de marzo de 2016

Experimento: qué le pasa a un muñeco de nieve en verano. Día 6

     Bueno. Ya está hecho. Voy a poner la imagen y dejaré que hable por sí sola.



     Vale, esta foto hace que la situación parezca peor. Pondré otra.


     Pues sí, ésta es la triste realidad. Se le ha borrado hasta la sonrisa, el experimento ha acabado y esto es lo que le sucede a un muñeco de nieve en verano.
     

     Y prometo que esta vez no he tenido que deshacer nada.


viernes, 11 de marzo de 2016

Experimento: qué le pasa a un muñeco de nieve en verano. Día 5.

     Me siento cruel. No puedo hablar más. Ser científico es muy duro.



     Tampoco voy a poner más fotos. No es bonito regodearse en las imágenes duras. Deberían aprender de mí muchos periodistas.

P.D. Pobrecito. Cómo sonríe.

jueves, 10 de marzo de 2016

Experimento: qué le pasa a un muñeco de nieve en verano. Día 4.

     Me siento como un realizador de documentales cuando ve que un león se va a comer a la cría de gacela. El progreso del experimento no augura un buen final para Olaf, pero me debo a la ciencia. Hay que llegar hasta el final. Tal vez esta experiencia le sirva a algún otro muñeco de nieve para no soñar con el verano.



     No puedo escribir más. Tengo que ser fuerte.


miércoles, 9 de marzo de 2016

Experimento: qué le pasa a un muñeco de nieve en verano. Día 3.

     Ante todo he de decir que mi Olaf es bastante pequeño. Así que no puedo estar segura de si con un muñeco de nieve más grande los resultados tardarían más en ser apreciables.
     El hecho de que esté en una silla también hace que todo sea más visible (es de plástico y todo queda retenido, aunque sospecho que algo de agua se evapora).




     Como podréis observar en las fotos, el deterioro ha sido grande. Ha perdido su botones, pero al menos no sufre, a juzgar por su gran sonrisa.

martes, 8 de marzo de 2016

Experimento: qué le pasa a un muñeco de nieve en verano. Día 2

     He descubierto que no sólo el calor del radiador afecta a mi muñeco de nieve. Además, a según qué hora de la tarde, el sol da sobre la silla. No sé si esto hace que mi experimento sea poco riguroso, pero tampoco era la intención. En realidad la temperatura no es constante y tampoco estamos en verano, así que...




     Como podemos observar en la imagen, Olaf ha perdido sus pies y se le está formando un pequeño charco alrededor.
     Sospechaba que algo así podía pasar.

lunes, 7 de marzo de 2016

Experimento: qué le pasa a un muñeco de nieve en verano. Día 1

     Como os adelantaba en el post anterior, estuve viendo la película "Frozen" con mi hijo el pequeño. Se me pegó (y mucho) la cancioncilla de Olaf "En verano" y pensé: "Vamos a descubrirlo".
     El problema es que estamos a primeros de Marzo y en España, por lo que las temperaturas aún no son ni primaverales. Dentro de casa tendremos unos 23-24º, insuficientes para nuestro experimento.
     Así que voy a dejar el muñeco de nieve encima de una silla y cerca del radiador (que quema al tacto) y veremos lo que ocurre.




     Pues nada, ahí le he dejado. A que haga lo que hace un muñeco de nieve en verano.

sábado, 5 de marzo de 2016

Experimentos

     ¡Pufff! Llevo muchísimo tiempo sin publicar nada, pero es que eso es algo que realmente no me sobra. Así que tengo que elegir entre tejer y publicar. Y, claro, gana tejer.
     Sin embargo estos últimos días me sentía un poco inquieta y no conseguía centrarme en nada. Los Reyes me trajeron una lana chulísima con la que me hice un cuello (más bien me hice 3. Deshice 2 y me quedé con la última versión) y me sobró un poco más de medio ovillo. Y con él he estado tejiendo y destejiendo este último mes diversas versiones de diferentes proyectos, hasta que me he aburrido.Y entonces, viendo la peli de Frozen con mi hijo pequeño me decidí: vamos a descubrir qué le pasa a un muñeco de nieve en verano. Y en ello estoy.
     En breve, las conclusiones. Os doy una pista: tiene algo que ver con el nombre del blog.